¡¡¡Rayos, esto es yuri!!! |
Por que creo que aquí lo ultimo que importa es el ping- pong...
Con la clásica forma contemplativa de los animes de la TBS (que no digo que este mal) veo esta serie anime y me deja mas dudas que certezas.
Este es el clásico ejemplo como cuando rompes una relación y dices, "no eres tú, soy yo"; lo malo es que con un solo capitulo a la vista mas parece un fracaso en la primera cita.
Y es que esta Adachi to Shimamura es todo menos un spokon. Aquí la pelotita que viene y que va, parece ser mas un hilo físico para que se promueva el romance entre nuestras dos protagonistas. A la par que vemos como sugerentemente se nos impone la imagen de una de ellas viendo a la otra mientras se sonroja.
Será por la edad que mis hormonas masculinas ya no reaccionan igual, o porque simplemente la vergüenza ajena ha escapado definitivamente de mi cuerpo y ya no hacen la combustión de cuando era un inocente aficionado al anime ante tal provocación fanservera.
Si bien las protagonistas son monisimas (en todo el sentido de la palabra), hay un espíritu de rebeldía, y, como clásica premisa del yuri mas procaz, se nos dice que son dos almas solitarias que solo pueden sentir paz escapándose de clases y refugiándose en un mismo lugar, también tiene esos halos de anime que no es anime sino mas bien una oda al surrealismo. Mas ligado a una película que a una serie de tv.
Tanto para que al final la pelotita venga y vaya, y nuestras protagonistas se den cuenta que se aman. Si este fuera un ecchi bien hecho, vería potencial en los movimientos y agitaciones de las protagonistas. Pero aquí solo importan las miradas y los sonrojos. Lastima!
Primera impresión: ¿qué miércoles es el minion vestido de astronauta?
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